8/11/10

El silencio de los políticos


No hay nada que hacer, aunque queramos cambiar el mundo, mejorarlo, los gobernantes hacen lo que se les manda de hacer, pero no desde el pueblo, que ha votado por ellos, sino más bien desde las grandes corporaciones y los bancos, que solo quieren guerras y dinero, dinero, dinero. Podemos salir a la calle, podemos hacer marchas, chillar infinitamente en contra de la guerra, como lo hicimos aquí en España, pero de qué sirvió. Estamos en guerra… en Afganistán. Es decir, que hagamos lo que hagamos ELLOS se saldrán con la suya.


¡Entonces de qué sirve votar me pregunto yo! Y lo digo con un tono un poco áspero. Un poco cansado también. Sin hablar de la desesperación, allá en el fondo de este tono.


Gente buena quiere la paz. Gente conciente quiere que ya paren las guerras y que no se produzcan más genocidios como el que se está realizando en Irak. Gente despierta no quiere comer productos modificados genéticamente. Podemos escribir y hablar, hablar horas y horas, podemos andar y manifestar, NO HAY NADA QUE HACER.


Hoy, quizás porque hace frío y viento y todo está tan gris, no veo ninguna luz positiva. O lo veo muy claro, todo depende del punto de mira. Ahora sí, me harta tanta sordera de la parte de los gobernantes. ¿Por qué son así? ¿Han hecho un pacto con el diablo? No entiendo.


Si queremos que la civilización evolucione por el buen camino esto será posible si los políticos toman una posición evolutiva. Por lo que veo todos los políticos están ciegos y sordos, inmunes a la voz popular. Alomejor tienen las manos liadas, por muchos intereses creados. Entonces que hagan lo posible para quitarse este nudo que los tiene amarrado a la insipidez, a la avaricia, a la estupidez. Sin leyes ni una voluntad política no iremos muy lejos. Por muy despierto que esté este pueblo que ya esta bastante cansado de tanta imbecilidad política.


Ah, claro… soy una pesimista y no se debe ser pesimista en estos tiempos. Pero yo no soy de las que hablan del milagro del despertar de las conciencias. Porque no hay milagro alguno a la vista. Pero claro, este es mi punto de vista. Pero cuidado: mi punto de vista es igual de valuable como el que cree que los extra-terrestres van a venir a salvar la situación del planeta.


Tampoco creo en que tenemos los políticos que nos merecemos. No es verdad. No nos merecemos a estos guerreros ni a estos inconcientes para no decir claramente a estos enfermos mentales. Un amigo me dice muy a menudo que no todo es culpa de los políticos. ¡Pero bueno! Entonces de quien es la culpa, ¿del padre de familia? ¿Él tiene la culpa del hambre en el mundo? ¿De que en Haití se coman tartitas de arena?


Ya esta bien de tanta culpabilidad.


Mientras los políticos vean al mundo como una mercancía, algo ajeno a la realidad, mientras sigan decidiendo sin pensar en la humanidad, mientras les importe un bledo si miles y miles de niños mueren cada día… mientras sigan sordos, ciegos y mudos… poco la situación cambiará.


Para mí, el silencio de los políticos es lo más horrible que está pasando. Y es la culpa de todo lo que pasará.


2 comentarios:

JOSÉ TADEO TÁPANES ZERQUERA dijo...

Querida Lydia:
Es necesario cambiar el sistema. Cambiarlo todo de arriba a abajo. Hemos fabricado un mundo en el que el DINERO, es quien manda. La lógica es. Lo que da dinero es bueno, lo que no da dinero es malo. Dicen que a Bush le dijeron con antelación que iban a volar las Torres Gemelas. Seguro que se preguntó a sí mismo. ¿Esto dará me dinero o no? Y como la respuesta fue positiva, pues simplemente miró para otro lado. Hasta ese punto hemos llegado.
Belén Esteban gana más dinero que el presidente del gobierno. Es una energúmena pero tiene más horas de televisión que todos los premios nobel juntos.
Vivimos en un mundo donde las mayores inteligencias del planeta no tienen voz ni voto, a nos cuando dicen algo que ayuda al poder a tener más dinero y más poder.
Y lo peor es que nos han hecho creer que este es el mejor de los mundos posible, que esta es la mejor de las sociedades posible.
Si lo que hemos construido es una mierda que se cae a pedazos, ¿con qué autoridad moral ejecutamos acciones como la de bloquear a un país como Cuba? ¿Qué? ¿No nos gusta ese sistema? ¿Es que acaso bloqueando a la isla le estamos ofreciendo algo mejor? ¿Es que acaso cuando acabemos con el comunismo allí, tenemos algo bonito que ofrecerle a los cubanos?
Lydia, repito, tenemos que empezar de cero. No hay manera de arreglar las cosas. Mientras el mundo esté en manos de un poder al que nosotros no elegimos, estamos jodidos. No hay democracia ni hay nada. Todo es una gran mentira.
Ahora bien, creo como los filósofos orientales que pensando negativamente, ahondaremos el problema. Será mejor que tengamos fe en el mejoramiento humano. CREER ES CREAR. Creed entonces que ese futuro mejor es posible, y así desde nuestras mentes, estaremos contribuyendo a fabricar ese mundo ideal que todos anhelamos.
El camino es el camino del amor y del perdón. No puede ser otro. Mientras la humanidad no interiorice la idea de la UNIDAD, es decir, que todos somos UNO, un solo ser, no habrá amor posible, y sin amor no habrá felicidad.
Besitos:
Tadeo

José Cemec dijo...

El silencio de los corderos, digo de los políticos, bueno, es lo mismo. Nosotros somos corderos de los políticos y ellos lo son de las multinacionales. Estamos cansado de repetirlo, pero no por gritar mucho y más fuerte se van a solucionar los problemas.

Todo se resume en una palabra, o mejor dicho, en dos, dinero y poder, que vienen a ser lo mismo. Yo te doy a ti y tu me das a mi y los demás, o sea, la población que se joda, que para eso son la parte más débil de la cuerda.

Pero lo que más me fastidia es que nos traten como a imbéciles. Que hablen y hablen, se peleen entre ellos delante de las cámaras y por la espalda se harten de mariscos y se den palmaditas en la espalda riéndose de los incautos que vamos a votar creyendo que con nuestro voto estamos haciendo algo positivo. Lo único que hacemos es cambiar de collar, pero el perro sigue siendo el mismo.

Bueno, no continúo porque, al igual que a ti, me pone de mal humor reflexionar sobre cuestiones que no tienen solución, por lo menos yo no se las veo, en estos momentos.

Un abrazo y gracias por tus comentarios.