18/9/09

Rashomon o el bosque de la esperanza







Es casi el otoño, mi estación preferida. Y he tenido ganas de ir a visitar a mi amigo espiritual, Akira Kurosawa.

He elegido Rashomon, o mejor dicho lo que ocurrió en el bosque Rashomon, un bosque peligroso y misterioso, como son todos los bosques: andar en medio de Rashomon es viajar en el centro de uno mismo, en el centro del universo, en el centro de Todo.

¿Que pasó en Rashomon? Sabemos por seguro que hubo un asesinato. Un hombre fue encontrado muerto. Es lo único que sabemos, este fue el suceso o, como lo llamarían los franceses, este fue un fait divers. Ahora, como ocurrió este suceso ya no estamos tan seguros. Nunca sabremos la verdad de los hechos ya que no hay una verdad absoluta. Este es el tema más visible de la película de Akira Kurosawa.

Pero hay el tema principal, o como lo llamo yo, la conciencia del tema de esta película: como vivir en un mundo donde no hay una verdad absoluta.

Esta pregunta el ser humano siempre ha querido contestarla. ¿Tiene sentido la vida? Nosotros mismos, cada día al levantarnos, al abrir los ojos, nos la hacemos. O cuando somos testigos de injusticias, o cuando van mal las cosas. ¿Tiene sentido todo esto? ¿Vale la pena vivir en este mundo de locos?

Y así la película empieza con los dos personajes principales de este relato: el leñador y el monje. Ellos procurarán contestar a esta incógnita, los dos en medio de una gran confusión porque se acaban de dar cuenta que no hay una verdad absoluta.

¿Qué es lo que hay entonces?

Ha ocurrido un suceso terrible en el bosque de Rashomon, han matado a un hombre y violado a su mujer. Cada implicado en este suceso confesará los hechos, hasta el mismo muerto lo hará gracias a la participación de un médium. Cada uno dirá como vivió el suceso. Y las tres versiones serán totalmente diferentes las unas de las otras.

Entonces, ¿qué pasó realmente?

También el leñador, que descubrió el cuerpo del marido, tendrá su propia versión, diferente de las otras. ¿Estamos delante de cuatro verdades o de cuatro mentiras? ¿Y que nos dicen estas cuatro versiones?

Hasta el cínico, el hombre normal y corriente que no se hace ninguna pregunta, el hombre que no se sorprende de nada, seguro de si mismo, el que no se aterroriza ante el horror, el que es conciente que siempre habrá miseria y guerras y lo acepta, el que solo cree en sí mismo, este cínico también dará su propia versión de los hechos.

Y es ante este cínico personaje que nos damos cuenta que quizás, digo quizás, todo es proyección: cada personaje proyecta sus fantasias, sus debilidades, sus miedos ante lo ocurrido. Cada personaje juega su personaje, mintiendo, cambiando los hechos, dramatizando. Proyecciones de un ego que nos envía un espejo oscuro y tétrico del ser humano: orgullo, avaricia, soberbia.

Quizás también el cínico tenga razón, quizás el ser humano es esto y solamente esto: un ser orgulloso y mentiroso, egoísta. La vida es dura con sus calamidades, con las guerras, con el hambre. Es así, dice el cínico. Hay que aceptarlo y sobrevivir.

Pero el cínico no se hace preguntas, él mismo es un ladrón. Sin embargo el monje y el leñador sí. Ellos dudan y sufren. Ellos se preguntan. Ellos, ante tanta confusión, han perdido la fe. La fe en la humanidad, en la vida.

¿Hay esperanza? Akira Kurosawa fue un artista positivo, como lo fue Fellini. Sus películas son poderosas de energía y de movimiento. La duda y la confusión son necesarias para avanzar y aclarar. Muchos personajes de Kurosawa siempre se preguntan y siempre encuentran una respuesta. Nosotros encontramos la nuestra mirando a Rashomon, una bellísima película que habla del sentido de la vida.




10 comentarios:

Franziska dijo...

Creo que nos asustamos tanto de nuestra propia verdad que tomamos el camino de la huida hacia adelante, de la fantasía, de la mentira, cualquier cosa antes que mirar frente a frente a la verdad.

En el pasado mes de agosto, escribía yo algo sobre ese tema pero que no acabé porque me quedó mal hilvanado. Unos versos sólo:

"pero la verdad que el alma desnuda
aún se esconde recatada y muda
porque la verdad no es nunca placentera/
y a ella tememos llegar no cabe duda/
y así vivimos en un girar de noria
tomando cangilones de agua de ese cubo/
pero sin mirar a la profundidad del pozo."

Pero dejando este tema y entrando en cómo vemos las cosas que pasan, es cierto que nuestra visión lo deforma, lo interpreta de acuerdo con lo que somos capaces de comprender que no siempre se ajusta a la realidad. Vamos sin que yo piense que me conozco a mí misma, creo que sabiendo de mí mas que nadie, apenas sé nada ¿cómo voy a pretender que los demás me conozcan?

Has planteado un tema que daría para estar horas hablando.

Lydia dijo...

Y que bien lo has planteado tú tambien, Franziska! Creo que tienes que ver esta pelicula, porque tus comentarios van hacia lo que Kurosawa quiere decirnos, y lo que dices profundiza los mios. Es cierto que los personajes del suceso, el marido y su mujer y el bandido, son tan pateticos cuando uno los vé como almas perdidas en la huida de la verdad. Son personajes que muestran un abismo, el nuestro tambien. Mirarse cara a cara creo que no es posible, solo muy pocos puedon hacerlo.

Muchisimas gracias por tus comentarios y este poema inacabado tan bonito.

Un abrazo,

Luciernaga dijo...

¡Qué bien! No la había visto y por tanto ya tengo una película para ver. El tema me interesa mucho y Japón me fascina aunque reconozco que no he visto ninguna de las de Kurosawa (algo que voy a solucionar pronto).

Te acabo de contestar en Luciernaga y sí, creo que todo depende del punto de vista. Hay tantas realidades como observadores: será interesante ver como lo expone y lo convierte en arte Kurosawa. Aunque como ya te dije en mi post, para el budismo hay dos niveles de realidad: la relativa de todos los seres humanos, distorsionada por el velo de nuestros errores cognitivos y la absoluta que es la que llegan a contemplar los que han despertado (alcanzado el nirvana).

Un abrazo

§ 555 §

francesc dijo...

Hola Lydia, he visto alguna de Kurosawa, pero esta no. es muy interesante lo que dices plantea esta película.
Como bien dice Franciska, cada uno ve e interpreta lo que es capaz de ver y actuara en consecuencia, según su propio criterio e interese. Son tantas las variantes que entran en juego, que es muy difícil encontrar esa verdad absoluta que mencionas y todos gastan sus energías para buscar y luchar por su propia verdad, la única que para cada uno tiene sentido... asesinatos, guerras, injusticias,pero también aveces justicia, solidaridad, honradez y generosidad. Esta es nuestra es nuestra realidad, un revoltijo donde se esconde nuestra propia realidad y su sentido.
Un fuerte abrazo

Lydia dijo...

Luciernaga, espero que te guste la pelicula. Curiosamente, pero no gratuitamente, es un monje budista el que ha perdido la fé y el que vuelve a encontrarla, claro.

Un abrazo,

Lydia dijo...

Franki, que bien lo defines todo. Como se nota la sabiduria vuestra con vuestros comentarios. Es muy interesante. Os agradezco, Franziska, Franki y Luciernaga de vuestra visita y de vuestras palabras.

Un abrazo,

Luciernaga dijo...

Visto Rashomon y tras releer tu post veo lo bien que has planteado la peli. Es muy interesante el argumento y lo exótico de la realización: me han llamado mucho las "dobles cejas" de las mujeres. Yo creo que plantea preguntas y da pocas respuestas, ¡no es un film con un mensaje unidireccional!

Efectivamente ¿cual es la verdad? ¿es esta absoluta o más bien depende del punto de vista del observador? Las cosas no son en sí mismas, sino que más bien las creamos nosotros al procesar la información recibida por nuestros ojos y pasarla por el filtro deformante de nuestros prejuicios. Eso creo yo en este momento. 3 personas diferentes y siempre habrá 3 versiones diferentes. Las cosas son lo que pensamos que son, ¿de qué otra manera podría ser? No puede existir lo observado independientemente del observador. El observador crea la realidad con su observación ¿Crees realmente que el pájaro canta en el bosque de Rashomon si no hay nadie para escucharlo?

Un fuerte abrazo

555

Lola dijo...

Cuando vi esta peli era yo muy jovencita pero ya me hizo pensar mucho. La volvi a ver hace pocos años y saqué mucho mas en claro el mensaje. Que diferente manera de interpretar las cosas segun el momento de tu vida en que te encuentres,..... Besos Lola

Lydia dijo...

Luciernaga, creo que planteas muy bien la tematica (abierta) de la pelicula. No hay objetividad ni tampoco verdades absolutas, todo es incierto porque nuestra mirada no es limpida. Hasta el monje ha perdido la fé, es decir que su mirada es en cierta medida contaminada, no es pura aunque al final si. Ayer pensé que el mensaje, si hay un mensaje, seria el Amor, solo esto cuenta en esta tierra, el Amor y la Compasión. Y así termina la pelicula, con el reencuentro con el Amor.

Gracias por tus comentarios. Un abrazo,

Jurema dijo...

Se me ha encogido el corazón, son el espejo del alma de muchos seres humanos..

Un abracito