25/2/08

Corrida





Cuando se trata de hablar de los toros, como dicen por aquí, es decir hablar de la Corrida, soy de una intransigencia muy parecida a la del hermano Jean, de la obra de Rabelais. Mi intransigencia es tan fuerte que podría levantar con un dedo una mesa de roble y tirarla sobre la cabeza de los que disfrutan de este espectáculo immoral.

Dentro de unos días este pueblo se llenará de turistas para venir a ver torturar a los toros. Ellos dicen que esto es arte, y lo dicen tan convencidos, pobres ignorantes. Lo juro, cuando uno venga y me diga esta burrada lo voy a coger por el cuello y le voy a decir lo siguiente:

Oye, guapo, chulo, ¿Dices arte? ¿Ves este alfiler? Pues con él te voy a pinchar tus cojones, si es que los tienes, y mientras te pincho te diré que esto es Arte. A ver si te gusta, imbécil.


Ya lo dije, soy intransigente. Soy obtusa, pierdo la razón. No puedo soportar el sadismo camuflado con palabras de buen gusto. Dicen también por aquí, y se creen tan inteligentes cuando lo dicen, que los toros están “hechos” para esto. Es decir: para que los maten torturándolos. Que gente tan bonita.

Siento rabia y vergüenza ajena. Me da vergüenza pasearme por el pueblo cuando vienen con autobuses y con sus Mercedes y todos tan orgullosos de participar en algo tan inhumano y tan sádico. Al Marques de Sade le gustaría esta gentuza. Porque son gentuza, ni más ni menos.

Cuando es tiempo de Corrida se me ponen los pelos de punta. Miro España y me digo lo atrasado que está este país. Comen carne, les gusta el ganado, la ganadería, y además, por si no fuese poco, disfrutan viendo matar sádicamente al toro, una de las bestias más nobles de la tierra. Me recuerdan los patéticos turistas que compran manos de gorilas para utilizarlas como cenicero. Son así de irrespetuosos, sin moral, sin ética.

Digo: banda de imbéciles.





24/2/08

Un canto Zen

Quiero compartir con vosotros y contigo, Laika, este magnífico canto Zen, Voz y Magnetismo del universo. Cuando estamos atentos a esta Voz, a la vez interior y a la vez superior, llega la calma. Y con la calma llega la paz. Y con la paz no solamente llega un cierto entendimiento pero tambien un espacio neutro, un espacio simplemente espacio. Vacio y lleno de silencio.

Aunque solo dure dos minutos. Son dos minutos que ayudan a centrarse.



21/2/08

Ibrahima Gueye, Ibou







Ayer, por pura casualidad, o pura sincronicidad, mirando por Internet me enteré de que Ibrahima Gueye, mi primer marido, murió el mes pasado.

Hacia mucho que no lo veía, yo sabía que vivía en Francia, pero desde 1998 no había tenido ningún contacto con él. Y ahora ya no hay más nadie como él sobre la tierra. Y la tierra, el universo están mas tristes sin su presencia.

Fue un gran percusionista, un gran animador, creía en la unión de las culturas, en el mestizaje, en el crecimiento interior gracias a la simbiosis entre razas y nacionalidades. Juntos hicimos un viaje intercultural con otros 60 participantes, con el organismo Jeunesse Canada Monde. Me enamoré de él y nos casamos en Senegal. Luego por cosas de la vida nos separamos pero seguimos con esta amistad hecha de ausencia, silencio. Y en mi vida siempre había un Ibou en algún lugar tocando el Tam Tam y alegrando los corazones y el alma.

La ultima vez que lo vi fue en una discoteca africana, en Montreal. Me habló de su vida, de su mujer, de sus dos hijas, y la música, su pasión. Me gustó tanto verlo feliz, con proyectos. Sus ojos brillaban. Su sonrisa. Su gentileza. Fuimos a tomar un café él, un amigo y Claude, mi esposo de ahora. Siempre era así con Ibou, siempre te lo encontrabas cuando menos te lo esperabas. Fue un gran viajante.

Y ayer, de golpe, esta noticia. Y al leer sobre su fundación, el grupo BOUTATA, he descubierto un Ibou maduro, organizador, amado por muchos y respetado por su trabajo, un gran músico. Un Ibou que realizó su sueño, su proyecto de vida.

Y desde aquí te digo adiós, amigo mío.

8/2/08

Los niños esclavos

Dice Boris Cyrulnik:

"El historial de la carnicería de niños en el mundo se apoya todavía en la defensa de los valores tradicionales. Durante estos últimos diez años, para defender una nación, una religión, a un líder o una concepción de la economía, se ha matado a dos millones de niños de menos de diez años, cinco millones están inválidos, un millón perece entre los muros denominados orfelinatos, de seis a diez millones de soldaditos participan en combates recientes en 25 países, y doce millones de refugiados carentes de famillia, de pais, de escuela y de oficio se preparan para una vida sin raíces y sin esperanzas. Sin contar los menores de 15 años que trabajan hasta morir en una industria tradicional o para el turismo sexual, que es más difícil de contabilizar"

Boris Cyrulnik, El Encantamiento del mundo


6/2/08

Para Chapellina

Chapellina,
Sé que te gustan los animales, como a mí. Y que te gusta cuando bailan. Aquí tienes un caballo precioso que le gusta bailar. Disfrútalo. Mira su bellísima cola, como va y viene de lo contento que está. Y sus orejitas, como se mueven y sabe, este suave caballo, lo bello y majestuoso que es bailando.






3/2/08

Para reir

Vamos a reirnos un poco, Laika, de los hombres de corbata, que de pateticos (todo iguales) son una farsa.





2/2/08

El perro bailarín

!Laika! A ti que te gusta tanto bailar con migo, míra este perro bailarín. Y a bailar, Laika, perra querida. Bailando se van las penas.